En este Sistema está prohibido discriminar por raza, religión o sexo, y no solo es delito penal la discriminación sino que hay toda una enorme propaganda para indicar que estos temas 'no existen', no hay razas, no hay sexos sino géneros y no hay religiones sino meras supersticiones.
Machaconamente se repite que en todos los cargos oficiales deben haber gentes de todas las razas, de todos los géneros y todos laicos (si tienen una religión debe ser algo personal y no visible en público y de forma oficial).
Sin embargo hay una libertad absoluta, es más, una clara tendencia oficial a la discriminación, por temas económicos, laborales, éticos o culturales.
Si en un club o una sociedad exigen 20.000 euros de entrada no se considera 'discriminación', si una persona gana un millón de veces más que un obrero no hay discriminación. Si un partido marxista propone una clase social como la única válida, o un sindicato se considera 'de clase' no hay discriminación, si una asociación solo acepta a empresarios, no hay discriminación.
Pero vamos a fijarnos en el segundo tema, la discriminación por trabajo laboral.
El Presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, declaró oficialmente que su nuevo gobierno era 'feminista', pero no dijo que fuera 'socialista'. No hay ni un solo campesino u obrero entre sus cargos.
En todo el Parlamento no hay casi (no sé si hay alguno por despiste) campesinos, gente que hayan trabajado la tierra, ni asalariados que hayan trabajado con sueldos menores al doble del salario mínimo.
Pero es que en el Parlamento pasa lo mismo, se pide que hayan más mujeres o más subsaharianos (antes se decía negros) o norteafricanos (antes moros) pero nunca se ha mirado cuantos campesinos u obreros hay o han habido.
Incluso por ley se trata de que en los Consejos de Administración de las empresas deben haber parte según su sexo-género, pero nunca se reclama que hayan obreros de esas empresas.
Ni siquiera en el Ministerio de Agricultura se encuentran campesinos o en el de Industria obreros.
Por supuesto que los cargos técnicos exigen unos estudios pero los cargos políticos, de control o de consulta sería muy lógico que fueran en parte para los trabajadores de esos ambientes, los que conocen el tema directamente.
Si se me dice que hace falta una preparación técnica, diría que más falta haría una cualificación ética.
Pero se impone una absoluta falta de cualificación por ética para todo cargo electo. Se piden muchos más requisitos para tener el carnet de conducir que para 'conducir' un Ministerio, el propio Gobierno o presentarse a elecciones.
No se pide un cierto estudio de su pasado, su trabajo, su familia, su comportamiento o sacrificios efectuados por la Comunidad, nada, cualquier miserable es válido para la democracia.
En cuanto al tema cultural, si un artista actual tiene gran éxito entre el público pero su obra es figurativa, o sea entiende, no será aceptado en el Museo de Arte Contemporáneo, ni tendrá reconocimiento alguno. El sistema discrimina totalmente a quien no se ajuste a las normas del arte-basura. Una cosa que siempre me hecho gracias es que, en cambio, cuando se trata de hacer los retratos oficiales del Rey o Ministros, etc. nunca llaman a Tapies o a un mironiano de esos para hacerlos pese a que esos pintamonas son los premiados y alabados en todos los premios oficiales. Es una lástima, sus retratos abstractos en los centros oficiales serían el hazmerreir público.
Así que el problema no es que no se discrimine en el Sistema sino que se discrimina por muchos motivos y se prohíbe por otros, por los que molestan a los principios del capitalismo progresista.
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